LA NEGRA SOSA

Regresé hoy de Paraná. Me bañé y salí con Julio y Elsi hacia la costanera. Hoy hubo cambio de Gobernador en Santa Fe y para amenizar el acto estuvo nada más y nada menos que Mercedes Sosa.
Pocas veces me he conmovido o algo ha logrado alterarme. Sea teatro, danza, música, lo que sea. No sé si es verdad que el hombre fue hecho de barro y creo que en mi caso me pasé un poco de tueste. Y no sólo por el color, sino porque a veces uno parece ser más duro que los demás para ciertas cosas. Los golpes de la vida.
A Mercedes Sosa la he escuchado hace mucho tiempo. Su figura regordeta, su voz gruesa, su porte, toda ella siempre fue motivo de admiración. Pero nunca conté con la oportunidad de escucharla en vivo.
Pero para todo hay una primera vez.
Y hoy fue.
Gracias, nuevo gobernador de Sante Fe que no sé cómo se llama.
Ella, ahí, en medio del escenario, sentada, cantando...
Yo, al menos a 500 metros parado en la raíz de un Palo borracho, logrando verla entre las ramas. Y ella, cantando.
Me emocionaba.
La cámara estaba ya casi sin pila pero quise grabarla, atrapar un poco el momento.
Y ella cantaba.
Un escalofrío me recorría el cuerpo. La gente aplaudiendo, coreando. "Que lo injusto no me sea indiferente... si un traidor puede más que unos cuantos..." cantaba la negra Sosa. Y el escalofrío me recorría, la mano me temblaba, no podía sostener la cámara. Y sentía los ojos que se humedecían. Ganas de llorar. Y la mujer, ahí, sentada, con su microfonito, cantando. No coreografías, no luces, no bailarines, no glamour, sólo una mujer gorda sentada, con un poncho y una bufanda roja, cantando.
Así de simple.
Y yo dejándome llenar por eso, por la voz, por la energía colectiva de la población de Santa Fe, por una señora que canta. Que en verdad canta.
A muchos les importará un huevo Mercedes Sosa, muchos más no la conocerán, a otros les gustará... lo único que puedo decir es que esta moche a mí me pasó algo, "algo". Me inicié de Villamelón. "Algo".
Y todo en medio de un evento político y la caída del peronismo.
Las cosas poseen más de lo que uno espera.
Definitivo.